Método de María Montessori | Qué es, principios fundamentales, ventajas y desventajas, y diferencia con el método tradicional

Un enfoque integral y holístico, es decir, el método Montessori, es un sistema didáctico y de cuidado destinado a niños en edad preescolar y escolar. Es un método que, a diferencia de la educación centrada en la disciplina y la obediencia del niño hacia el adulto, se enfoca en el entorno del niño, incluye materiales que apoyan el proceso de aprendizaje y pone el acento en las tareas y en fomentar la autonomía.

Introducción al método Montessori | ¿Cómo funciona el método Montessori?

El método Montessori, ampliamente conocido en todo el mundo, se opone a los principios de la educación tradicional. Los niños educados y criados según este enfoque descubren el mundo a través de todos los sentidos, mientras que la educación tradicional tiende a centrarse en el aprendizaje mediante la escucha y la lectura. El método Montessori pone el foco en la acción del niño, en los procesos de autoaprendizaje y en el desarrollo de la autonomía. En otras palabras, su objetivo principal es ayudar al desarrollo integral del niño, con el apoyo del profesor, el padre o la niñera.

• ¿Qué es el método Montessori?

El método Montessori se basa en la convicción de que los niños son pequeños exploradores, y que lo mejor es enseñarles a través de la acción y la exploración autónoma, ya que es así como obtienen mayores beneficios para su desarrollo. Un elemento clave de este enfoque es un entorno educativo cuidadosamente preparado, en el que el niño tiene libertad para elegir sus actividades, los materiales educativos y el ritmo de aprendizaje.

¿Es difícil aplicar el método Montessori?

Introducir un nuevo método de enseñanza en la vida escolar o familiar puede ser un reto, ya que requiere un conocimiento profundo de la filosofía y la práctica del trato hacia el niño, así como un compromiso con la preparación adecuada del entorno y de los materiales educativos.

Por otro lado, incluso pequeños pasos hacia la aplicación del enfoque Montessori pueden tener un impacto significativo en el proceso de aprendizaje del niño y en su forma de percibir el entorno.

Principales ventajas del método Montessori

• Individualización: el método promueve la individualización del aprendizaje, permitiendo adaptar el ritmo y el estilo educativo a las necesidades de cada alumno.

• Desarrollo de la autodisciplina: se anima al niño a tomar decisiones y a planificar su día.

• Desarrollo de la creatividad: los niños tienen la oportunidad de explorar el mundo y descubrir cosas nuevas, lo que fomenta el aumento del pensamiento creativo y la capacidad de crear.

• Equilibrio entre trabajo y juego: el método Montessori combina el trabajo, es decir, el aprendizaje, con el juego. Los niños aprenden a través de la actividad.

Principales desventajas del método Montessori

• Falta de estructura organizativa: algunos consideran que la ausencia de reglas estrictamente definidas y de una estructura claramente establecida puede llevar al caos y a un uso ineficiente del tiempo.

• Falta de estándares de evaluación: la evaluación se considera solo un procedimiento formal, lo que puede dificultar la comparación de los logros de los alumnos.

• Necesidad de personal especializado: el método requiere la intervención de profesores cualificados que cuenten con conocimientos sobre las técnicas de enseñanza y los principios del método.

• Barreras económicas: la educación basada en el método Montessori puede ser costosa, lo que limita su acceso a un público más amplio.

Historia del método de María Montessori, ¿cuándo surgió el nuevo enfoque de enseñanza para niños?

Detrás del conocido método se encuentra la doctora y pedagoga italiana María Montessori (1870-1952), especializada en psiquiatría y pediatría. Su investigación sobre niños con problemas psicológicos condujo a una nueva perspectiva sobre el desarrollo infantil, lo que a su vez orientó los principios para trabajar con los más jóvenes. El método utilizado por María Montessori resultó ser estimulante no solo para niños con discapacidades, sino también cuando se aplicó en la educación de niños completamente sanos.

Tras completar sus estudios médicos y obtener el título de doctora en psiquiatría, María Montessori comenzó a trabajar en la Clínica Psiquiátrica de la Universidad de Roma. Este puesto le permitió investigar métodos de educación para niños discapacitados, y sus conclusiones confirmaron que los niños deben tener condiciones adecuadas para su educación y estímulos para su desarrollo.

En 1907, María Montessori abrió la Casa de los Niños, donde investigó su método no solo en alumnos discapacitados, sino también en niños completamente sanos. A lo largo de casi 50 años trabajando con niños, Montessori definió sus principios y objetivos para el desarrollo infantil, entre ellos, asegurar un desarrollo integral y una preparación óptima para la vida adulta.

Principios y fundamentos del método Montessori

El principio fundamental en el que se basa el método Montessori es la libertad del niño y el fomento de la creatividad en el alumno. A diferencia del método tradicional, que pone un énfasis particular en la disciplina del niño, el método Montessori se enfoca en la autoconciencia y la adaptación a las reglas de la vida mediante el aprendizaje y la observación. Según María Montessori, la infancia es un período en el que el niño absorbe grandes cantidades de información del entorno y la asimila de acuerdo con sus propias capacidades. El niño debe aprender a cuidarse a sí mismo sin críticas provenientes de arriba, por lo que el método se basa en un aprendizaje constructivo a partir de los errores, no en un mundo de prohibiciones y órdenes.

La pedagogía del método Montessori se basa en la observación cuidadosa del niño y un enfoque individualizado para cada alumno, incluso para el niño más exigente, conocido como «high need baby». Crear un entorno adecuado para cada niño es sumamente importante. El método Montessori considera el entorno como materiales que apoyan el proceso de aprendizaje del niño, así como la persona que crea dicho entorno, es decir, el maestro o el padre.

10 principios del método Montessori en resumen

El método Montessori, gracias a sus principios establecidos, permite aumentar la concentración y la autonomía del niño, desarrollar la confianza en sus propias capacidades y ofrecerle una base adecuada para la vida adulta. Un niño que conoce sus responsabilidades y tareas está preparado para llevarlas a cabo (sin premios ni castigos) cuando no se cumplen. Un niño criado según los principios Montessori debería caracterizarse por una mayor paciencia, esmero y conocimiento. Los principios principales son los siguientes:

1. Autonomía, permite que el niño sea el guía – El maestro o cuidador debe apoyar al niño solo cuando sea necesario. El alumno debe tener libertad para elegir el lugar, el tipo y el tiempo de su trabajo.
2. Sin castigos ni premios – El principio fundamental de la pedagogía Montessori es alejarse del tradicional enfoque de «la zanahoria y el palo». El niño debe conocer sus responsabilidades y cumplirlas por propia voluntad, sin coacción.
3. El maestro = mentor – La persona que desempeña el rol de maestro apoya al niño en sus decisiones, asesora y observa. El mentor es alguien que posee la información necesaria y que no toma decisiones en lugar del niño.
4. Silencio y armonía – Comprender el mundo a través del silencio es sumamente importante según los principios del método Montessori. El niño aprende mejor gracias a un mayor enfoque, y el trabajo es más efectivo y produce mejores resultados cuando se realiza en las condiciones adecuadas: tranquilidad y silencio.
5. Orden – El entorno en el que se realiza el aprendizaje y la ejecución de tareas debe estar ordenado. El niño aprende mejor cuando no hay distracciones a su alrededor.
6. Grados de dificultad – El maestro debe comprender las habilidades del niño y ajustar las tareas en consecuencia, las cuales, con el tiempo, deben evolucionar y cambiar en cuanto a dificultad.
7. Elementos del entorno – El niño debe aprender a utilizar los elementos de su entorno. Los juguetes plásticos «ya hechos» no contribuyen al desarrollo de la creatividad.
8. Precaución – En actividades que impliquen el uso de cuchillos o tijeras, se requiere la supervisión de un adulto.
9. Libertad – El niño tiene derecho a explorar los materiales y juguetes de diversas maneras según su propio juicio, siempre que no los dañe ni haga daño a otros.
10. Respeto – El niño aprende a respetar a los demás, incluso cuando comete errores.

Educación tradicional frente al método Montessori

La educación tradicional, como se ha mencionado anteriormente, se centra en la disciplina y la obediencia; el niño debe ser quien escuche. El método Montessori, por otro lado, permite al niño descubrir el mundo a través de su propia experiencia y conocimiento, los cuales se van ampliando día a día.

¿Cómo es una escuela Montessori?

Una escuela Montessori difiere de una escuela tradicional en muchos aspectos. En primer lugar, las aulas Montessori se caracterizan por un verdadero orden, donde cada objeto tiene un lugar asignado. El niño está preparado para crear y mantener el orden. Tiene acceso a herramientas y materiales de los cuales extraerá su conocimiento, y el entorno no debe interferir en el proceso de aprendizaje, es decir, no debe estar desordenado. Los juguetes, modelos, herramientas y materiales disponibles deben ayudar al niño y no convertirse en obstáculos. En una escuela Montessori se encuentran principalmente rompecabezas, acertijos, puzzles, juguetes educativos y muchos otros objetos similares que sirven para ampliar el conocimiento y la creatividad.

El principio de «solo un ejemplar» es común, y tiene como objetivo enseñar al niño la paciencia y la espera de su turno.

Escuela tradicional frente al enfoque Montessori

La escuela tradicional se diferencia de la escuela Montessori en el ritmo, donde el niño actúa únicamente como oyente u observador; no se implica, no crea ni actúa de forma autónoma. El método Montessori considera el proceso de aprendizaje como un camino de descubrimiento, durante el cual el niño desarrolla concentración, creatividad, autodisciplina y motivación para seguir avanzando.

¿Por qué el método Montessori se ha vuelto tan popular?

Los principios del método Montessori se han hecho populares por su promoción de la autonomía, la exploración por parte del niño y su enfoque en el desarrollo individual. Todo ello ha llamado la atención de padres y educadores no solo en Polonia, sino en todo el mundo.

¿Los cambios tras introducir el método Montessori se notan de inmediato?

Los efectos de introducir el método Montessori pueden observarse en distintos aspectos, pero no siempre son inmediatos. Algunos cambios, como un aumento en la autonomía o el interés por el aprendizaje, pueden ser visibles relativamente pronto, mientras que otros, como el desarrollo de habilidades sociales o emocionales, pueden requerir más tiempo.

¿Cuál es el objetivo del método Montessori?

El objetivo principal de la pedagogía de María Montessori es ofrecer al niño la oportunidad de un desarrollo integral. El apoyo cultural, espiritual, social y físico debe servir como camino hacia la formación de un conjunto único de rasgos de personalidad, el desarrollo de un carácter adecuado, así como la adquisición de conocimientos y habilidades. Este objetivo se lleva a cabo a través de:

• fomentar el respeto por el trabajo y el orden;
• desarrollar la autonomía;
• trabajar en un ambiente de silencio, tanto de forma individual como colectiva;
• abandonar el sistema de premios y castigos;
• enseñar el respeto hacia los demás;
• potenciar habilidades y talentos individuales;
• alcanzar la autodisciplina y el afán por lograr metas personales.

Preguntas frecuentes

• ¿Existen escuelas públicas o centros de educación infantil basados en el método Montessori?

Sí, el método Montessori se aplica tanto en escuelas privadas como públicas, e incluso en guarderías. Su popularidad crece año tras año, por lo que muchas escuelas están incorporando elementos del método en sus programas educativos. Además, existen centros que se basan exclusivamente en los principios y métodos Montessori.

• ¿Es el método Montessori adecuado para todos los niños?

A pesar de sus muchas ventajas, el método Montessori no es adecuado para todos los casos. Dado que pone un fuerte énfasis en la autonomía, la autorregulación y el aprendizaje a través de la exploración y la experiencia, puede resultar demasiado exigente para algunos niños, como aquellos con un trastorno del espectro autista más avanzado.

• ¿Se pueden aplicar elementos del método Montessori en casa, aunque el niño no asista a una escuela Montessori?

Sí, incluso si el niño no acude a una escuela Montessori, los padres o cuidadores pueden aplicar con éxito elementos del método en casa, por ejemplo, creando una habitación Montessori que favorezca el desarrollo y la autonomía del niño.

Citas de Maria Montessori

A continuación, presentamos algunos ejemplos de frases de Maria Montessori:

• «Para ayudar al niño, debemos proporcionarle un entorno que le permita desarrollarse libremente.»
• «La simplicidad de los objetos a menudo favorece el desarrollo de la actividad y las habilidades.»
• «Dar libertad a un niño no significa abandonarlo a su suerte.»
• «No basta con que el maestro ame y comprenda al niño; primero debe amar y comprender el universo…»

Resumen: el método de Maria Montessori – lo que conviene saber

El método Montessori es una forma única de enseñar y educar a los niños, basada en el desarrollo del potencial completo de cada pequeño. Sus pilares principales son un entorno adecuadamente preparado —como por ejemplo la habitación del niño— y el cumplimiento de los principios Montessori, es decir, fomentar la autonomía y el aprendizaje a través del ensayo y error.

Los educadores en este enfoque actúan como guías, cuyo principal objetivo es apoyar el desarrollo individual del niño sin imponer estructuras rígidas. Al aplicar esta metodología, tanto padres como docentes abren las puertas a un viaje de verdaderos descubridores, en el que aprender es una aventura hecha de juego, exploración y descubrimiento constante.